Año 1250 AC del Antiguo Egipto. Entonces gobernaba Ramsés II, el tercer faraón de la Dinastía XIX, y entonces, como ahora, se tenían en cuenta las ausencias al trabajo e incluso se pasaba una especie de lista. Todo esto nos lleva hasta una tablilla muy especial que se encontró hace tiempo. Un pedazo de piedra con registros donde aparecen pormenorizadas todas y cada una de las excusas que citaron los trabajadores hace 3.200 años para no asistir al trabajo. Un auténtico tesoro del pasado que nos recuerda que no somos tan distintos.

La tablilla es un Ostracón, que son fragmentos de cerámica o piedra caliza que contenían inscripciones en egipcio, griego o copto, y que se hacían en un tiempo donde escaseaba el papiro (además, era muy costoso). A lo largo de la historia se han encontrado un buen número de estos tesoros del pasado que han servido para encontrar registros de todo tipo, desde listados y quejas hasta transacciones comerciales o simplemente relatos de la vida cotidiana.

En el caso que nos ocupa, se trata de un Ostracón que actualmente es parte de la colección del Museo Británico. Un fragmento único, ya que revela el listado de asistencia al trabajo en el denominado como Año 40 de Ramsés II, proporcionando un registro de trabajadores durante 280 días del año.

Según cuenta el museo sobre el ostracón:

En la pieza hay 24 líneas de hierático nuevo egipcio en el anverso y 21 líneas en el reverso. Una lista de cuarenta nombres está dispuesta en columnas en el borde derecho de cada lado, seguida a la izquierda por fechas escritas en negro en una línea horizontal. Encima de la mayoría de las fechas hay una palabra o frase en rojo que indica el motivo por el cual esta persona estuvo ausente del trabajo en esa fecha.

Por supuesto, aquí venimos a curiosear cuáles fueron las fórmulas utilizadas por los trabajadores para faltar al trabajo hace más de tres milenios. En algunos casos, las excusas son exactamente las mismas a las de hoy. Muchos, simplemente dicen “enfermo” o “ausente”, y nos hubiera gustado estar en ese momento de la historia donde el jefe de turno los presiona para que dieran una razón más exacta. 

La tablilla del Museo Británico

Sin embargo, y esto es lo realmente interesante, otras tantas de las ausencias contienen excusas extremadamente pormenorizadas, con un nivel de transparencia y detalle inaudito pasados 3.200 años.

Veamos algunas de ellas:

  • Beber con Khonsu: En este caso no está claro si el empleado estaba bebiendo con el antiguo dios egipcio Khonsu o con algún colega con el mismo nombre. Lo que sí queda claro es que le pareció que irse a beber era una buena excusa para faltar al trabajo.
  • Elaborar cerveza: Este señor o señora es un ídolo de nuestros tiempos, no tanto hace 3.200 años, ya que aparece en varias ocasiones en la tablilla. Lo que sí se sabe es que la cerveza era esencial para los antiguos egipcios y se consideraba un tipo de alimento. Además, se asociaba con dioses y diosas.
  • Con su jefe: A falta de más datos, parece un caso de trabajo independiente, quizás con el jefe de su jefe, o simplemente con otro jefe.
  • La esposa/hija estaba sangrando: aquí parece claro que se hace referencia a la menstruación de su hija o esposa. Los hombres supuestamente ayudaban en casa mientras sus esposas o hijas menstruaban. 
  • Hacer remedios para la esposa del escriba: un ejemplo del máximo respeto que existía al escriba. Se podía faltar al trabajo si se estaban haciendo remedios para la esposa.
  • Buscando piedra para el escriba: un poco como la excusa anterior. Si había que buscar piedras, se hacía. Recordamos que los antiguos egipcios daban gran importancia a la palabra escrita y los escribas ejercían una de las profesiones más nobles. 
  • Ofrenda al dios: parece claro. Ese día tocaba dedicárselo al dios de turno.
  • Enterrar al dios: de todas las excusas, esta es la que más me intriga. Ojalá saber a qué demonios se refieren.
  • Con su dios: aquí tenemos que suponer que es como la excusa de la ofrenda, pero sin tanta explicación.
  • Fortalecimiento de la puerta: todo indica que este trabajador faltó al curro para hacer de manitas en casa.
  • Su fiesta: ídolo absoluto junto a los que faltan para hacer cerveza. En el antiguo egipcio se respetaba mucho lo de pasarlo bien, incluso servía como excusa para faltar al trabajo.

Estas fueron las más divertidas que encontré en la tablilla, pero había alguna más, desde el que indicaba que ese día estaba construyendo la casa, hasta otro que decía que le había picado un escorpión, el que estaba embalsamando a su hermano o el que estaba sufriendo de un ojo.

Momentos del pasado únicos con algunas semejanzas y diferencias a la actualidad. Si bien hoy seguimos teniendo que indicar la razón por la que faltamos a un día de trabajo, lo cierto es que no tenemos que dar tantas explicaciones, o no tan personales, sobre las ausencias.  

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